En el discurso brindado por el lanzamiento del proyecto Expoterra, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, expresó que “hay que hacer un cambio cultural en la Argentina, y es un cambio cultural en el mundo. Es una batalla cultural, es poner al ambiente en los primero lugares de la agenda”.
Además, enfatizó que “sería casi temerario no actuar ni cambiar el modo de vida en el cual estamos. Sería una ceguera no leer los datos y los mensajes que nos está mandando la naturaleza hoy en día”.
“Sin embargo, esa ceguera y esa temeridad es la que vemos nosotros cuando analizamos la conducta de los que tienen en sus manos la responsabilidad de la gobernanza global de nuestro planeta”, agregó el ministro.
Lorenzetti invitó a todos los ciudadanos a involucrarse en el proyecto: “Yo hace más de 20 años que estoy trabajando en las cuestiones ambientales y me he dado cuenta que no vamos a lograr nada si la cuestión ambiental es sólo una cuestión de los ambientalistas. Necesitamos que estén todos los sectores para que exista un cambio”, señaló.
En ese sentido, indicó que “Expoterra es un proyecto para todos, inclusivo. Para todos los sectores y para todos los que piensan de una manera y de otra. El denominador común es que hay que conservar el ambiente”.
Para referirse al tema, el presidente de la Corte hizo un paralelismo con las causa de derechos humanos: “Los juicios de lesa humanidad en Argentina son un modelo en todo el mundo por el nivel de avance que se ha logrado (…) Surgieron porque antes hubo luchadores en la sociedad, porque hubo gente que se paró y dijo ‘hay que hacer algo’ (…) Esto es lo que hay que hacer en el ambiente, una batalla cultural en la cual nosotros avancemos y creemos en toda la sociedad la idea de que la defensa del ambiente forma parte del contrato social de los argentinos”, explicó.
Con respecto a la supuesta contradicción entre desarrollo y ambiente, Lorenzetti manifestó que “muchas veces caemos en estas opciones trágicas: desarrollo o ambiente. Cerramos las fábricas o protegemos al ambiente. El ambientalismo se encierra muchas veces en estas opciones trágicas. Nosotros decimos que este proyecto no debe encerrarse en las tragedias sino en las soluciones, y hay soluciones. Hay una nueva economía ambiental que nos puede dar una oportunidad extraordinaria”.
“Se trata de ver cómo podemos hacer para que haya desarrollo, generación de riqueza, empleo, pero que sea sustentable (…) Esta es la nueva economía ambiental”, agregó.
Según Lorenzetti, “tenemos una cultura de derechos individuales que hemos defendido durante tres siglos y la debemos seguir defendiendo (…) Pero además de esos derechos, surgió ahora la solidaridad, que es ver cómo articular los derechos sociales, los derechos individuales para que no nos destruyamos unos a otros. Hay un sistema que nos une”.
“Podemos ser un poco más solidarios, creo que no nos cuesta nada si restringimos un poquito alguna de las cosas que hacemos todos los días, nos tratamos mejor y mejoramos el ambiente”, señaló.
Con respecto a los objetivos del proyecto, indicó que “tenemos que generar credibilidad. No se puede seguir declarando y haciendo leyes que nadie cumple. Tenemos que enfocarnos en los temas concretos, en las soluciones concretas”.
“La Argentina tiene una sociedad civil extraordinaria. Todos se deben sumar y por eso decimos que este es un proyecto inclusivo, abierto, que todos hagan algo, cada uno en su lugar”, concluyó.
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